En muchas ocasiones este día no tiene tanto peso como su similar en el mes de mayo. Y es que celebrar a las madres siempre ha sido un tema de mayor relevancia que el hacerlo hacia los padres. Puede ser por un tema cultural, la mamá representa el amor y el padre la disciplina, ¿y a quién le gusta festejar al promotor del hacer lo que no nos gusta?
Sin embargo, para muchos, el celebrar al papá es algo igual de importante que hacer lo mismo con la madre. Porque sigue habiendo padres que lo dan todo por su familia. Salen a trabajar todos los días, muchas veces relegando por la hora el acto del beso de despedida y la bendición antes de ir a la escuela, a la mamá; y no porque no quieran hacerlo, sino porque implicaría llegar tarde al trabajo y atentar contra la fuente del sostenimiento doméstico.
Y probablemente cuando llegan a casa tienen que ser “el papá”, el que corrige, “¿por qué sacaste estas calificaciones”, “el que orienta, “no le debes hablar así a tu madre”, el que conduce la vida familiar, “debes cuidar a tus hermanos”; poco tiempo para llenar de alegría la casa, algo que sin duda hacen perféctamente las madres.
En CONSEG reconocemos a esos padres, que con su ejemplo y constancia y disciplina conducen la seguridad en cada uno de sus servicios, con la única finalidad de hacer que su familia se sienta orgullosa de ellos y que nunca les haga fala nada.
Desde aquí mi más sinceras felicitaciones y profundo agradecimiento por ser unos superpadres, y por consecuencia, unos superguardias.
Cmdt. Jonathan Morales
#SOYCONSEG